Enero es mes de propósitos de año nuevo que, en algunos casos, son algo abstractos e irreales. ¿Te has parado a pensar si debe ese ser tu objetivo? Te propongo otro: llevar una vida más saludable simplemente adoptando pequeños cambios que mejoren tu salud y la de tu entorno. Usar menos el coche y caminar más; ir en bicicleta; consumir más alimentos frescos locales y de temporada y menos procesados y no desperdiciar comida ni agua son algunos ejemplos.
Obsesionarte con perder peso rápidamente no te llevará a buen puerto. Incluso puede ocasionarte problemas de salud y de mala relación con la comida.
Si quieres hacerlo bien, acude a un dietista-nutricionista, inicia alguna actividad física guiada o contrata a un entrenador personal. Es un regalo que te harás para siempre, aprenderás a comer mejor y a realizar ejercicio sin riesgos para tu salud.
Quédate con estos tres consejos:
- No hagas dietas milagro ni detox. Vuelve a tu alimentación normal y, si no era muy adecuada, añade pequeños cambios cada semana, cada mes, que mejoren tu alimentación para siempre.
- Actívate. Retoma tu actividad física, no la aumentes de forma descontrolada para combatir esos “excesos” y sedentarismo navideño. Si no hacías nada, plantéate andar más, salir más, moverte. Busca una actividad deportiva que te guste y pide asesoramiento a un profesional.
- La próxima navidad, disminuye esos excesos. Son fechas con algunas comidas especiales, elaboradas, en familia, con alimentos diferentes, no dos semanas de comer y beber hasta no poder más. Sé consciente de ello.
Y, ante todo, acuérdate de este mensaje: el número de la báscula no debe obsesionarte, tu salud es más que un número.
Si tienes alguna duda, sugerencia o quieres comentar tu caso particular, no dudes en dejar tu comentario y te responderé lo antes posible.
Paloma Quintana Ocaña
Dietista Nutricionista
Colegiada nº: CV 00791
Twitter: @NutricionconQ
Instagram: @nutricionconq